En Persea Jewelry, cada joya no es solo un objeto, es un fragmento de tu historia. Una pieza de plata puede acompañarte en momentos luminosos, viajes, rituales, comienzos. Y como todo lo valioso, merece cuidado. No por miedo a que se estropee, sino como un acto de amor y presencia. Cuidar la plata es cuidar de ti.
¿Qué es la plata 925?
La plata que usamos en nuestras piezas es plata de ley 925: un metal noble, brillante, con carácter. Está compuesta por un 92,5% de plata pura y un pequeño porcentaje de cobre, lo que le da mayor resistencia sin perder su esencia. Es maleable, sensible, como quien la lleva.
¿Por qué la plata cambia de color?
La plata vive. Con el tiempo y la exposición al aire (especialmente al azufre), puede oscurecerse. Este proceso, llamado oxidación, es natural. Algunas personas incluso lo valoran como una pátina del tiempo. Pero si deseas recuperar la plata oscurecida, hay formas suaves de hacerlo.
Consejos para cuidar tus joyas de plata artesanal
Aquí te dejamos estos cinco trucos para limpiar joyas de plata en casa:
1. Guárdalas con intención. Conserva tus piezas en un lugar seco, de preferencia en bolsas de tela o cajitas individuales. Evita el contacto con otras joyas que puedan rayarlas. Un joyero con alma también merece un espacio cuidado.
2. Evita la humedad. Quítate las joyas antes de ducharte, nadar o hacer ejercicio. El agua y el sudor aceleran la oxidación.
3. Aléjalas de productos químicos. Perfumes, cremas, desinfectantes... todos ellos pueden afectar el brillo de la plata. Ponerte tus joyas como último paso de tu ritual de arreglo es siempre buena idea.
4. Límpialas con suavidad. Tras cada uso, puedes pasar un paño suave. Para una limpieza más profunda, mezcla agua tibia con unas gotas de jabón neutro, limpia la plata con un cepillo de cerdas suaves, enjuaga bien y seca completamente. No uses pasta de dientes ni limpiadores agresivos: lo artesanal necesita ternura.
Haz del cuidado un ritual. Dedica un momento al mes para limpiar tus joyas favoritas. Hazlo con música, con calma, como quien pule un recuerdo. Esa pausa también es un regalo.
El valor de lo auténtico. En Persea, cada pieza está hecha con las manos, con el alma y con la intención de acompañarte. No es solo una joya: es un gesto, un talismán. Cuidarla es recordarte a ti misma que lo auténtico merece ser preservado.
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